Los integradores son socios excelentes y actores estratégicos para el sector de la seguridad electrónica

En la actualidad las empresas han optado por buscar socios integradores para desarrollar sus proyectos a largo plazo, estrategia que ha ayudado a muchas de ellas a salir a flote o a cumplir sus metas de desarrollo.

Sin embargo, antes de crear un vínculo de negocios es importante conocer cuáles son sus políticas para formar lazos de confianza, así como dedicar esfuerzos conjuntos para mantener el bienestar de los equipos de trabajo.

“La asociación con una empresa significa mucho más que comprar sus soluciones a un precio competitivo. La formación de una relación sólida implica, como mínimo, trabajar de forma regular con sus empleados para identificar áreas de crecimiento cooperativas y mejorar la colaboración y la comunicación cuando sea necesario”, afirma Jeff Coco, Director de Servicios Técnicos de Axis Communications.

Por ejemplo, en compañías como Axis, en donde los integradores ayudan a los clientes finales a desarrollar sus proyectos de videovigilancia inteligente para optimizar el funcionamiento de su infraestructura, se tienen, como ejes rectores, valores y programas de integración para hacer de sus socios aliados estratégicos en la implementación de sus tecnologías.

Los integradores son pieza clave en el crecimiento de una compañía y son el canal hacia el usuario final, pero esos no son sus únicos beneficios:

1. Facilitan la focalización y resolución de necesidades de los clientes: un integrador es el encargado de llevar a las empresas el desarrollo de proyectos para los clientes finales, por lo que utilizan sus conocimientos y habilidades para crear soluciones óptimas que se adapten a los mercados.

2. Ayudan a consolidar la presencia global de la marca: las grandes empresas han optado por buscar integradores que les permitan llegar a todos los mercados emergentes, por eso amplían sus relaciones con integradores a lo largo del mundo. Esto les permite conocer las necesidades del mercado global y, a través del componente de investigación, buscan el desarrollo de soluciones que respondan a las necesidades de todo el mundo.

3. Persiguen los mismos objetivos de la empresa: los integradores no son personas externas a una empres, también forman parte del equipo de trabajo, comparten objetivos generales de una compañía y, a través de su experiencia, desarrollan tácticas para alcanzarlos.

Los integradores no son vendedores sino estrategas y expertos en ofrecer soluciones óptimas, tomando en cuenta las opiniones y necesidades de los clientes. Para ello cuentan con certificaciones profesionales que garantizan la calidad de sus servicios, por lo tanto son socios excelentes para que las empresas alcancen su máximo rendimiento.

Jeff Coco comenta que “Un equipo experimentado de profesionales apasionados y comprometidos siempre está decidido a resolver los problemas de sus clientes de la manera más eficiente posible”.

En este contexto, es fundamental desarrollar programas dirigidos a los integradores para establecer lazos de confianza y trabajo y así garantizar que los clientes obtengan las mejores soluciones. A través de esta estrategia la empresa será punta de lanza en el mercado.