Contra el caos vehicular, el control a través de la tecnología se hace inminente

La Encuesta de Percepción Ciudadana de Red de Ciudades Cómo Vamos 2015, realizada a 12.548 colombianos que residen en 10 diferentes ciudades del país, deja entrever la manera cómo los habitantes ven la seguridad y movilidad en las principales vías de Colombia.

El estudio determina que en promedio, el 56 por ciento de los ciudadanos piensa que el desarrollo la zona donde viven va por buen camino siendo Manizales, Medellín y Barranquilla, las capitales que más conformes se sienten en este aspecto. Sin embargo, la encuesta en el segmento de movilidad vial, arroja que Bogotá, por ejemplo, ha despertado negativas opiniones, ya que cerca del 52 por ciento de los encuestados asegura que hoy gastan más tiempo en llegar a sus destinos vs el año anterior. Lo mismo opinó el 58 por ciento de los Bumangueses y el 52 por ciento de los cartageneros, del tráfico en sus respectivas ciudades.

Respecto a la satisfacción con las vías de la ciudad, Manizales y Medellín ocuparon los primeros lugares, 76 y 61 por ciento respectivamente, mientras Bogotá e Ibagué se ubican los últimos lugares con 13 y 19 por ciento.

Parte del rezago tecnológico en muchas ciudades se debe a que, a pesar del considerable número de cámaras instaladas, éstas tecnológicamente no son adecuadas para controlar el flujo de movilidad vial.

Este tema pone en evidencia la necesidad de tener más control sobre lo que pasa en las vías para hacer una gestión inteligente del tránsito. La buena noticia es que, mientras aumenta la concentración de vehículos en grandes ciudades, también la tecnología avanza para reducir el impacto – como lo están evidenciando algunas experiencias pioneras.

Cámaras de videovigilancia pueden ser una fuente de información precisa, detallada y en tiempo real sobre los vehículos que circulan en calles, autopistas urbanas y carreteras. Esos dispositivos permiten una efectiva gestión del tránsito para disminuir y prevenir accidentes, agilizar el tráfico para evitar episodios de congestión, apoyar la labor fiscalizadora de las autoridades y, en general, modernizar las operaciones en beneficio de los usuarios – como numerosas ciudades ya están comprobando en todo el mundo.

Un ejemplo del uso de esta tecnología en el transporte, es la solución implementada por la autopista Ruta del Maipo en Chile, la que conecta a Santiago con la zona sur del país, constituyéndose en una ruta clave para la economía nacional. Esta concesionaria adoptó un sistema de cámaras de videovigilancia provisto por Axis Communications, cuya información ha colaborado con la disminución en un 40 por ciento de la cantidad de incidentes en sus 237 kilómetros de extensión.

Del mismo modo, las autoridades de inspección del tránsito de la región de Sverdlovsk, en Rusia, organismo dependiente del Ministerio del Interior, implementaron un sistema de videovigilancia con cámaras en resolución HDTV de Axis Communications, complementadas con funcionalidades analíticas que han permitido disminuir en un 25 por ciento los incidentes, delitos y riesgos en las rutas.

En el caso de la ciudad de Pratto, en Italia, las autoridades están utilizando un sistema de videovigilancia que incorpora una solución analítica de conteo en tiempo real para planificar y optimizar el flujo de tráfico en sus calles, túneles, puentes y carreteras, al obtener una fuente de información estadística detallada sobre el número, tipo y velocidad de los vehículos que circulan diariamente.

Por otra parte, en la ciudad de Maastricht, en Holanda, la tecnología de videovigilancia también se está posicionando como un aliado para velar por la seguridad y el control del tráfico, pero en este caso, de su principal medio de transporte urbano, la bicicleta. Las autoridades desarrollaron un ambicioso plan para masificar su uso, para lo que han desplegado un sistema de monitoreo centralizado de fibra óptica con cámaras Axis, complementado con software cuyo objetivo es analizar y facilitar información en tiempo real sobre el estatus de los estacionamientos disponibles para bicicletas en la Estación Central y el casco urbano de la ciudad, en beneficio de los usuarios.

Estos son algunos ejemplos inspiradores que están surgiendo y que apuntan para un futuro en el que las personas podrán llegar más temprano a sus oficinas, regresar a sus hogares en un plazo de tiempo más corto, reduciendo incluso la emisión de gases nocivos en el aire. En ese escenario, se generarán alertas a una central de monitoreo a partir de la presencia de personas cruzando una autopista o vehículos en sentido contrario, se multará automáticamente a quien se estacione en doble fila cerca a los colegios, y se identificarán vehículos infractores tan pronto ellos salgan de sus garajes, con la posibilidad de descubrir el camino que está haciendo un vehículo recién-robado por ejemplo. Es un camino ya existente, del cual no estamos lejos y al que sin duda un País como Colombia, necesita llegar.